El Atlético contacta con Luis Enrique.

El Atlético se mueve. El discurso oficial pasa por recordar una y otra vez que la gran preocupación de la entidad actualmente es asegurar una plaza en la próxima Europa League, y que será a partir de entonces cuando se acometa cualquier tipo de cambio, pero lo cierto es que el mercado de entrenadores se sondea continuamente. Y si no lo hace el propio club, lo hace alguien en su nombre. Algo así ha sucedido en el caso de Luis Enrique, con cuyo entorno ya se han producido los primeros contactos.

Porque conviene dejar claro que el actual entrenador del Barcelona B se ha convertido en una de las grandes opciones para sustituir a Quique Sánchez Flores en el banquillo rojiblanco. No en la única, por supuesto, pero sí en la más atractiva a día de hoy. Gusta, por ejemplo, a Miguel Ángel Gil, consejero delegado rojiblanco. Gusta también, por ejemplo, a Jesús García Pitarch, director deportivo sobre cuya continuidad, en todo caso, hay serias dudas en el club.

Luis Enrique, cuyo equipo se enfrentó ayer mismo al Granada, anunció hace tres semanas que dará por finalizado su ciclo en el filial azulgrana una vez concluya la presente temporada. No sólo consiguió el ascenso a Segunda, sino que ha instalado al Barça B en la categoría de plata con seguridad, hasta el punto de que si el campeonato concluyera hoy sería precisamente su condición de segundo equipo la que impidiera disputar la promoción para ascender a Primera división.

Son muchos los jugadores que se están revalorizando bajo sus órdenes, en la que al fin y al cabo viene siendo la apuesta principal de cualquier cantera. Precisamente ésa es otra de las virtudes que se aprecian en un club, el Atlético, que quiere hacer de las categorías inferiores una de las bases principales para configurar la plantilla en las próximas campañas. Guardiola utiliza con frecuencia jugadores del filial.